Los seres humanos se encuentran en la necesidad de expresarse. Tiene el fin de ofrecer información que es de necesaria transmisión para quien la emite. La escritura es el complemento del lenguaje. Expresar un mensaje de forma escrita se ve desde los primeros tiempos, el hombre se veía en la necesidad de expresar mensajes a través de imágenes o dibujos realizados en piedra. Sin embargo, la escritura como ahora la conocemos inicia en la antigua Mesopotamia (geográficamente hoy en día corresponde a Irak). Para la época necesitaban preservar las operaciones comerciales, este método era llamado “escritura cuneiforme” esto se debe a que a que sus signos tenían forma de cuña. También destaca la escritura logográficas, su signo se representa a través de elementos ideográficos y pictográficos; los primeros son símbolos gráficos que manifiestan ideas, conceptos, expresiones que se han mantenido vigentes en el tiempo; mientras que los segundos representan objetos o experiencias relatadas con imágenes. Los egipcios no tomaron la “escritura cuneiforme” de los mesopotámicos a la hora de realizar su método para la preservación de términos en relación a las transacciones comerciales, sino que decidieron crear su propio lenguaje escrito, así inician los jeroglíficos. Desde estos indicios la escritura pasa a ser uno de los sistemas de comunicación más importantes de la humanidad. Una de las grandes ventajas que posee la escritura ante el lenguaje verbal es que la primera puede preservarse en el tiempo y eso lo vemos en los “jeroglíficos” que han sido estudiados en la actualidad. El mensaje que es generado por el medio escrito puede reproducirse de igual forma o puede ser modificado. Hoy en día para algunas personas les es preferible expresarse de modo escrito que de manera verbal, esto se debe a que desarrollan un estilo acorde a su comodidad y logran manifestar de manera efectiva lo que desean en el instante. La escritura no sólo consiste en forma y estilo, sino que también es un medio que transfiere conocimientos. Gracias a ella tenemos registro de nuestra historia y podemos definir parte de nuestra cultura, ideales y creencias. La escritura es parte esencial del ser humano, nos complementa y nos hace ser parte de lo que somos. Por: Geraldine A. Martínez M.
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Septiembre 2020
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